Darren Dolynski - Whitten
Scott E. Miller - Oficial Hopper
"Ernest Cobb" es el segundo episodio de la primera temporada de Alcatraz. Fue emitido por primera vez el 16 de enero de 2012 (en el estreno doble junto con Pilot). El francotirador Ernest Cobb reaparece en 2012 provocando varias víctimas mortales.
AVISO: Esta sección del artículo desvela detalles de la trama que tal vez no quieras saber. |
Historia[]
1960[]
Ingreso en prisión[]
En Alcatraz, Ernest Cobb, desnudo y cargando con su ropa, es llevado por E.B. Tiller y un par de guardias al patio para ver al alcaide Edwin James mientras los demás presos alardean desde sus celdas. En el exterior, Edwin dispara con un rifle a unas latas situadas en el otro extremo hasta que se acerca Cobb. Sarcásticamente, Edwin le felicita al nuevo prisionero por sus disparos certeros a distancia de 500 yardas matando a 16 personas, y le dice que a él le cuesta acertar en las latas que están en el patio y están tan solo a 20 yardas.
El alcaide le pregunta por su forma de elegir a las víctimas ya que son todas puntos iguales en su mira, y Cobb le responde que tan solo es una sensación. Luego, le pregunta por su proeza en la isla McNeil (la causa inmediata de su traslado a Alcatraz): logró un disparo prácticamente imposible contra un guardia con un arma casera de un solo disparo. Ernest Cobb afirma haberle dado en la pierna intencionadamente ya que tan solo quería ser transferido a Alcatraz y no cometer asesinato.
Edwin le dice que ahora pasará diez años en la roca, pero sin embargo es el primero que viene por voluntad propia, y Cobb le explica que lo único que quería es tener una celda privada. Antes de mandarlo a su celda, el alcaide le recuerda que hay una distancia de dos kilómetros hacia la orilla, con lo cual no hay nada que pueda intentar, y por último le pide algún consejo para disparar con el rifle. Cobb le recomienda bajar los hombros y es llevado a su celda mientras Edwin lo intenta y efectivamente acierta en el blanco.
Celdas principales[]
Ya acomodado en su celda, Ernest Cobb se despierta, lo ordena todo y se sienta en la cama, pero su tranquilidad solamente dura unos segundos: Yapper, el recluso de la celda contigua a la suya le observa con un espejo y empieza a darle conversación sobre su vida sin callarse. Cobb se molesta, pero de pronto son interrumpidos con un grito que viene de la zona de visitas: se trata de Jack Sylvane, que se enfada hablando con su mujer y pierde el control tirando una silla, con lo que tiene que ser llevado por los guardias. Cobb pregunta a donde le llevan y Yapper le dice que va a aislamiento.
Comedor[]
Posteriormente, Cobb es llevado por un par de guardias al comedor de la prisión, donde se reúne con el alcaide Edwin James, que come un filete al son de una música sin la compañía de nadie. Edwin invita a Cobb a sentarse junto a él en la mesa y saca una carta escrita por Cobb en la que le pide de forma respetuosa y formal el traslado a una celda en solitario para poder comer solo, evitar las salidas comunales al patio exterior y no poder hablar ni relacionarse con otros presos.
Edwin elogia la petición, sin embargo no la acepta; a pesar de la insistencia de Cobb, le dice que aquello no es un hotel donde él pueda elegir su alojamiento y le provoca diciendo que prefiere comer en privado y haciendo que se lo lleven.
Traslado a celda solitaria[]
Como el alcaide James deniega la petición de Ernest Cobb de traslado a una celda de aislamiento, decide llevar a cabo una idea para que el personal de Alcatraz sea forzado a permitir su traslado. Cuando la prisión inicia el aviso para que todos los reclusos se despierten y se preparen para el recuento, Cobb se prepara, sin embargo se queda sentado en la cama cuando dan el aviso para que todos se pongan de pie.
Un guardia, al ver que no se levanta, se lo ordena pero Cobb hace caso omiso. El guardia pide que abran la celda mientras los demás reclusos empiezan a alborotarse. Cobb empieza a susurrar su frase para concentrarse y mantenerse calmo («Hay 47 tablones en la valla...») pero el guardia, al ver que no se levanta, le golpea en la barriga y en la espalda con su porra.
Este incidente hace que tengan que llevar a Ernest Cobb a una celda de aislamiento, lugar que le presenta E.B. Tiller informándole sobre todo lo que pierde con el traslado (lejos de entristecerle, a Cobb le complacen los cambios). En cuanto le dejan solo, Ernest se sienta en la cama, contento de haber logrado estar allí.
Más tarde, Cobb recibe una visita del alcaide Edwin James, que aparece para elogiar su ingenio para conseguir su traslado, ya que él entiende lo que hizo Cobb: en vez de causar problemas importantes, tan solo buscó hasta encontrar la infracción simple y perfecta, que es la número 28 «rutina diaria, levantarse y disponerse frente a la puerta de la celda y permanecer allí hasta que la campana suene otra vez».
A pesar de ser una infracción tan pequeña, Cobb la llevó a cabo de una forma muy pública, con lo cual el alcaide tenía que hacer algo al respecto.
Edwin se va diciendo que Ernest ha ganado de forma justa y honrada, sin embargo, regresa justo después y le dice que tan solo falta algo. Los guardias abren la celda y entra Yapper en ella para hacer compañía a Cobb. Yapper empieza a hablar sin parar y el alcaide se va, diciendo que puede hacer lo que él quiere ya que Alcatraz es su prisión. Desesperado, Cobb grita, pero entonces se detiene a mirar la ciudad de San Francisco a lo lejos y al parecer se evade de su alrededor.
Conociendo a la doctora[]
Después de lo ocurrido en la celda de aislamiento, Ernest Cobb es llevado a la enfermería de la prisión, donde le tienen vestido con una camisa de fuerza ya que una y otra vez intenta ser aislado, a pesar de que no entienden sus motivos. Sin embargo, Edwin le dice que no se preocupe, ya que después de una investigación ha conocido a una doctora que podría estar capacitada para ayudarle y entender su mente. En este momento, le da la bienvenida a Alcatraz a la doctora Lucille Sengupta, que entra en la habitación para conocer a Cobb.
2012[]
Francotirador en el parque[]
En una colina cercana a un parque de atracciones aparece Ernest Cobb, con la misma apariencia que cincuenta años atrás, llevando una silla plegable y una cesta de madera. Tras prepararlo todo, se sienta en la silla y se pone a comer un bocadillo, disfrutando del ambiente. Luego, saca de la cesta una mirilla que forma parte de un rifle de francotirador y se pone a mirar a varias personas en el parque mientras dice «Hay 47 tablones en la valla», empieza a decir varios números y sonríe.
Mientras tanto, en la tienda de cómics de Diego Soto, él enseña al joven Chet varias cosas de la tienda de las que tendrá que encargarse ya que él estará ocupado con el tema del gobierno, aunque no devela mucho ya que no está autorizado a hablar sobre ello (sólo dice que es una autoridad civil).
Rebecca Madsen entra en la tienda con comida china de Dim Sum y le pregunta por su abuelo, Tommy Madsen, el prisionero 2002, ya que estuvo leyendo el libro de Doc y es el recluso que menos información tiene. Doc le dice que es por que no encontró nada más sobre él, y pregunta a Rebecca si es cierto que él mató a su compañero, a lo que ella responde que sí, y hojean las páginas con fotografías de prisioneros, preguntándose quien será el siguiente.
En la colina, Cobb monta su rifle de francotirador y, utilizando la silla plegable como soporte fijo, dispara a tres personas, asesinándolas en el acto mientras repite su frase y dice números. Acto seguido, la policía precinta la zona, los paramédicos se sitúan en la zona y llegan Rebecca y Doc, que son informados por un agente: un francotirador ha actuado y está siendo buscado por los SWAT en un radio de 700 metros.
Doc empieza a preocuparse por el hecho de que las victimas estén allí, ya que no lleva bien el hecho de tener que mirar. Rebecca le aconseja que se desvincule de todo y no se deje llevar por sus emociones para poder cumplir con su trabajo. Al reunirse con Emerson Hauser y Lucy Banerjee, todos observan como hay algunos cuervos muertos por el suelo. Doc inmediatamente relaciona aquello con Ernest Cobb, francotirador de Wichita que realiza tres tiroteos en tres días seguidos y luego se oculta.
Madsen pregunta por el modus operandi de Cobb, pero Doc se distrae ya que ve como los paramédicos se llevan los cuerpos de las víctimas, y se tiene que ausentar para respirar hondo y calmarse. Lucy les cuenta que los tiroteos suelen ser de forma aleatoria y no hay ningún modus operandi respecto a las victimas, con lo cual no tienen suficiente información para seguir.
Rebecca se acerca a Doc y él le dice que quizás no está hecho para aquello, pero Rebecca vuelve a meterle en el caso preguntándole por el tipo de rifle que Cobb utilizaba en la época (un Winchester modelo 70 según Doc, que usa las mismas balas que un M-40). Rebecca deduce que el departamento de policía cree que Ernest utiliza un arma moderna, por eso le están buscando demasiado lejos, pero el alcance de Cobb con un Winchester antiguo tan solo sería de aproximadamente 450 metros.
Al mirar a su alrededor, Madsen se da cuenta de que una colina cercana podría ser perfectamente el punto en el que había estado Ernest Cobb y decide subir con Diego para investigar. Allí, la detective recrea los disparos al suelo y a la noria y nota que al recargar, Cobb habría dejado los casquillos de bala detrás de él. Aunque Doc cree que alguien como Cobb habría limpiado el sitio antes de irse, resulta que no es así: Rebecca encuentra los casquillos que prueban que el tirador estuvo allí.
Ambos observan que la isla de Alcatraz se ve perfectamente desde allí, y se dan cuenta de que tienen dos días para encontrar a Ernest Cobb antes de que él se oculte.
Interrogatorio de Sylvane[]
En la nueva prisión de Alcatraz, Lucy Banerjee interroga a Jack Sylvane, enseñándole una fotografía de Ernest Cobb y preguntándole si le conoce. Sylvane le dice que no y Lucy le informa de que ha regresado a la ciudad, de la misma forma que él regresó. Lucy sigue haciendo preguntas relacionadas con lo ocurrido con ellos pero Jack, tras observar una cámara de vigilancia en la sala, pregunta quién le está vigilando.
La cámara en cuestión es utilizada por Emerson Hauser y su grupo de científicos, que les observan por una pantalla en otra sala.
Lucy le pregunta como volvió a aparecer, pero él le dice que no lo sabe: tan solo estaba en su celda, y luego de repente ya no estaba. La última pregunta que hace Lucy es referida a la llave que fue encontrada junto a Sylvane cuando le capturaron, pero él dice que no sabe nada al respecto. Jack tiene las manos encadenadas y es forzado a tenerlas encima de dos detectores que trasladan datos a los equipos de los científicos. Estos, analizando todo, determinan que el recluso está siendo sincero con sus respuestas, y que efectivamente no sabe nada.
Iniciando la investigación[]
En la base subterránea, Rebecca recoge la caja con las pertenencias de Ernest Cobb mientras Doc observa las puertas que carecen de manivela (hay una en la sala de investigación y otra en la de archivos) y el ascensor, que tiene tres botones que sólo pueden activarse con una llave, pero no saben para qué sirve todo aquello.
Doc cree que tan solo son una pequeña parte de la gran operación que tiene preparada Emerson Hauser, y que él carece de importancia, pero Rebecca le recuerda que fue la investigación de ambos la que hizo posible la captura de Jack Sylvane. Luego, ambos pasan a dedicarse al tema de Cobb: resulta que es el preso de Alcatraz que más tiempo pasó en las celdas de confinamiento solitario.
Al parecer, cuando fue capturado resulta que alguien le reconoció ya que estaba entre los más buscados de la lista del FBI, pero entonces él ya había causado muertes en ocho ciudades, desde Denver a Anchorage. No pueden recurrir a la lista de más buscados otra vez ya que no pueden hacer pública su reaparición tras medio siglo. En este momento aparecen Hauser y Lucy en la sala con los resultados de balística sobre los casquillos: tienen una coincidencia exacta con el arma preferida de Cobb.
Rebecca se pregunta cómo pudo conseguir un informe de balística en tan sólo dos horas, pero Emerson hace que se centren en la investigación y la detective le cuenta que habría utilizado un rifle antiguo, con lo cual tuvo que ir a una armería especializada.
Rebecca y Doc salen de la sala para ir a investigar a la armería seguidos por Lucy, a quien Hauser manda para que les acompañe. En la armería, Rebecca y Lucy hablan sobre Emerson: Lucy confiesa que a pesar de lo que aparenta, es bueno. Cuando Rebecca pregunta por el tiempo que lleva trabajando con Hauser, Lucy le responde algo inconcluso que la detective no entiende, y Doc observa las armas a su alrededor.
Rebecca se acerca al mostrador para hablar con el dependiente, Whitten, al que ya conoce. Le enseña una fotografía de Ernest Cobb (la misma enseñada a Sylvane) y Whitten le dice que nunca le ha visto, pero Madsen le presiona diciendo que es sospechoso del tiroteo habido por la mañana y el que le haya proporcionado las armas debe sentirlo mucho, con lo que se alegra de que no sea él.
Whitten confiesa que Ernest fue a la tienda hace varios días y compró un antiguo Winchester modelo 70, pero pagó con tarjeta, con lo que no tiene su nombre ni su dirección. Rebecca sospecha de que él recuerde ese detalle sin mirar y Whitten le cuenta que es por que es el único Winchester modelo 70 que vendió en la última década. El equipo accede a la grabación de seguridad y observa a Cobb, descubriendo una nueva pista: Cobb deja encima del mostrador una llave de hotel.
Incidente en el hotel[]
En una habitación de hotel, Ernest Cobb monta su rifle y se sienta en la cama a esperar. Rebecca habla con el recepcionista mientras Doc y Lucy hablan sobre el tema de las reapariciones de los presos de Alcatraz. Doc le pregunta como puede simplemente aceptar todo aquello como si no fuera algo increíble, y Lucy le responde que la perpectiva que tenga no cambia el hecho de que esté sucediendo.
Rebecca se reúne con ellos y les cuenta que han reconocido a Cobb y está en la habitación 123. Lucy dice que ha llamado a Hauser y estará allí en un momento, pero Madsen cree que no pueden correr el riesgo de que Ernest escape y cree que es mejor que suban ya y se queden atrás hasta que ella despeje la zona. Cobb espera en el mismo sitio mirándose en un espejo roto y Rebecca se acerca a la puerta diciendo que es policía.
Al no obtener respuesta, Rebecca decide entrar en la habitación y la revisa rápidamente con su pistola equipada, pero resulta que no hay nadie dentro. Cobb, que al parecer se encuentra en otra habitación, inserta una bala en su rifle.
Lucy y Doc entran en la sala y se ponen a investigar mientras Cobb se sitúa junto a una ventana y recita una vez más su frase, «Hay 47 tablones en la valla...» y los números 4, 7, 1, 2.
Lucy se acerca a la ventana y abre las cortinas, encontrando el mensaje «Puedo verte» y una mirilla dibujada. Rebecca, que también lo ve, le grita para que se cubra pero es demasiado tarde: desde la ventana del edificio contiguo, Ernest Cobb dispara una bala certera en el pecho de Lucy, que cae al suelo ensangrentada. Rebecca socorre a Lucy y pide a Doc que vaya a buscar a una ambulancia, mientras que Cobb desmonta y guarda su rifle para abandonar la zona.
En el callejón llegan los paramédicos, que llevan rápidamente a Lucy en camilla a la ambulancia. En este momento, aparece Emerson Hauser muy preocupado y les pregunta a cual hospital la están llevando, a lo que ellos responden que al Saint Mary.
Al irse la ambulancia, Hauser, Doc y una ensangrentada Rebecca quedan solos. Emerson le pregunta lo ocurrido y ella lo cuenta, pero entonces él empieza a culparla por lo ocurrido. Madsen le dice que Cobb les ha tendido una trampa como si ya supiese que ellos irían a por él, pero Hauser le pide que se calle y siga buscando al francotirador.
En un baño, Rebecca se limpia las manos y el pecho para quitarse la sangre y luego golpea el dispensador de papel al perder la paciencia, sintiéndose frustrada y enfadada por lo ocurrido. Entonces se para, respira hondo y se mira a si misma en el espejo. En el pasillo del hospital, una doctora parece poner a Diego al corriente de lo ocurrido. Emerson también va a la zona y Doc le dice que Lucy está viva, pero en coma, y que puede ser temporal o no.
Justo después, Hauser decide ir a la nueva prisión para hablar con Jack Sylvane. Le enseña una fotografía de Lucy y le pregunta si ella era un objetivo para ellos, pero él dice no lo sabe. Hauser insiste, pero al no obtener respuesta, le dice que quizás el doctor Beauregard pueda refrescar su memoria y Sylvane le mira irse con una expresión de preocupación.
Búsqueda de pistas[]
En la base subterránea, Rebecca y Diego siguen la investigación para encontrar a Ernest Cobb ya que es lo único que pueden hacer. En una de las pantallas, están marcadas en un mapa de Estados Unidos todas las ciudades en las que Cobb ha disparado a gente. Se pueden ver las víctimas de los disparos de cada ciudad, habiendo 19 en total en la pantalla.
Rebecca recuerda que Hauser les dijo que Cobb no tenía modus operandi y que sus disparos eran de forma aleatoria, pero planea la hipótesis de que use las víctimas aleatoriamente para ocultar su verdadero objetivo. Buscando un patrón, se fija en que en todos sus tiroteos siempre hay alguna chica joven de entre quince y dieciséis años.
La detective cree que esto puede deberse a algún hecho relacionado con una chica de esa edad en la vida de Ernest Cobb, pero Doc recuerda que él se crió en un orfanato y escapó cuando tenía doce años. Lo que sí sabe es que él buscó a su madre biológica y la encontró con la edad de veinte años pero ella no le aceptó.
Determinada a averiguar más, Rebecca se lleva la caja con las pertenencias de Cobb a su celda y se queda allí tratando de recrear la vida de Cobb mientras estuvo en aquella celda para saber en qué pensaba. Coloca sus objetos de higiene personal en la estantería y sólo restan sus gafas, una revista de coches con cortes en el medio y una lente circular que no entiende para qué podría haberla utilizado.
Doc aparece en la celda y le cuenta que encontró una caja en la sala de archivos llena de cartas que nunca llegaron a ser entregadas y una de ellas es para Cobb.
En Alcatraz, para recibir cartas, un preso tenía que dar al alcalde una lista de nombres de personas relacionadas. Cobb no tenía una lista de nombres, con lo cual nunca llegó a recibirla. La carta está escrita por Eloise Monroe, que cuenta que estuvo presente el día que Ernest fue a buscar a su madre. Ella también es su hija, de modo que ambos son hermanos. Eloise pide perdón por el comportamiento de su madre diciendo que nunca le gustaron las sorpresas y expresa sus ganas de mantener la comunicación con Cobb diciendo que siempre quiso tener un hermano mayor.
Doc cree que Rebecca tenía razón respecto a la supuesta chica, ya que probablemente Cobb se enfadase al ver que su madre tenía otra hija (que en aquél entonces tendría la misma edad que ahora tienen sus víctimas) a la que sí quiso cuidar y a él no le quería ver. Según Doc, Eloise ha fallecido en un accidente de coche hace nueve años. Con información sobre las razones de los ataques de Ernest Cobb, lo único que les falta es descubrir el lugar al que irá.
Madsen pasa toda la noche en la celda de Cobb y, al amanecer, descubre lo que hacía Cobb con los objetos: la revista se enrolla y se utilizan gomas elásticas para que se mantenga enrollada, la lente circular se inserta en un extremo de la revista y, por último, uno de los cristales de las gafas de Cobb que se puede sacar sirve para colocarse justo en medio de la revista enrollada, donde hay un corte que lo permite.
El resultado es una mirilla que Cobb utilizaba para ver la ciudad de San Francisco desde su celda, y es tan eficiente que se pueden llegar a ver hasta vehículos y personas en las calles. Doc aparece en la celda y Rebecca le enseña la mirilla, lo cual le impresiona.
Rebecca supone que Cobb simplemente se quedaba allí mirando y esperando la llegada del día en que estuviese libre y pudiese ir allí a matar.
Francotirador en el supermercado[]
Cobb vuelve a hacer exactamente lo mismo que en la colina cercana al parque de atracciones, pero esta vez en las cercanías de un supermercado Columbus. Después de comer, prepara su rifle y sube unas escaleras. Recitando una y otra vez el número 47, dispara a dos cuervos: uno de ellos cae en la ventana frontal de un vehículo, asustando a las personas en su interior. Después, Cobb dispara a tres personas y todos entran en pánico.
Rebecca y Doc descubren lo ocurrido viendo las noticias en la base y Doc cree que han fallado ya que es el tercer y último tiroteo de Cobb y ahora se ocultará. Rebecca, sin embargo, cree que Lucy no formaba parte de sus planes y que el incidente en el supermercado es el segundo, con lo cual tiene que haber un tercer tiroteo.
Utilizando un programa, ambos tratan de averiguar la siguiente ubicación en la que aparecerá Cobb a partir del punto de vista que tenía desde su celda. Deben buscar en un radio de cinco kilómetros desde la prisión de Alcatraz, donde se incluyen los dos altos puntos estratégicos en los que se situó Cobb previamente. Doc elimina las estructuras que no existían en el año 1963 ya que Cobb nunca las pudo haber visto desde su celda en ese entonces.
Emerson Hauser aparece en la base y les cuenta que Lucy está estable pero según los doctores todavía se desconoce la magnitud de los daños. Luego, se acerca al equipo para ver lo que han averiguado, y Doc les enseña los únicos dos edificios altos que existían en la época y que servirían como puntos estratégicos desde los que podría disparar al embarcadero 31 o al Fuerte Mason. Hauser y Rebecca se marchan de la base para ir a dichos edificios.
Investigando los edificios[]
Al llegar a la zona, Rebecca y Hauser deciden que lo mejor es separarse y que cada uno suba a un edificio ya que Cobb puede estar en cualquiera de los dos. Tras recordarle que tienen que capturarle vivo, ambos se separan y suben los edificios. Hauser utiliza el ascensor y luego las escaleras a la azotea, pero desde allí ve que Cobb está preparado en la azotea del otro edificio, a punto de disparar.
Cobb recita una vez más su frase y los números, pero Rebecca es capaz de llegar a la azotea a tiempo y le distrae antes de que dispare. Asustado, Cobb se gira y le dispara, pero Rebecca rápidamente se pone a cubierto. Aún así, Cobb vuelve a apuntar hacia abajo para disparar a alguien, pero Rebecca le grita para que tire el arma. Él vuele a disparar a Rebecca pero acierta en la pared. Hauser llega a la azotea y Rebecca le indica que Cobb está allí y tiene que ir por el otro lado para sorprenderle.
Aunque Cobb está otra vez concentrado para disparar a las personas de abajo, Madsen le distrae diciéndole que sabe que él se reunió con su madre y vio que tenía otra hija llamada Eloise, que le escribió una carta. Al ver que Hauser se acerca desde el otro lado, Rebecca deja el arma y se muestra, diciéndole que tiene la carta de su hermana y se la puede enseñar. Cobb se enfada y se gira para dispararle, pero Hauser le grita y él se despista.
Rebecca aprovecha el momento justo para aplacarle y Hauser le amenaza con su arma para que no se mueva. Emerson le pregunta a Rebecca si Cobb es diestro y al responder ella que sí, dispara a su mano derecha para impedir que vuelva a disparar, dejando atónita a Rebecca.
Epílogo[]
En el hospital, Emerson Hauser observa a Lucy desde la ventana de su habitación. Mientras, en el pasillo, Doc le confiesa a Rebecca que cree que no será capaz de soportar la presión y que no hará bien todo aquello, ya que tiene que lidiar con asesinos despiadados, cadáveres e incluso presenciar como alguien a quien conoce recibe un disparo.
Rebecca trata de calmarle diciéndole que es normal que se sienta así ya que es parte del trabajo, y le dice que debería ir a casa, descansar un poco y prepararse para la próxima reaparición ya que ella le necesita como compañero.
Después, Hauser sale de la habitación e intercambia una mirada con Rebecca antes de salir de allí.
En la nueva prisión, Hauser lleva a Ernest Cobb a una celda. Al verse, Cobb y Jack Sylvane intercambian miradas de asombro. Al encerrar a Cobb, Hauser le dice que pudo haberle matado, pero no lo hizo y ahora está allí, y va a empezar a desear que le hubiesen hecho.
Análisis[]
Curiosidades[]
- Durante el picnic, Ernest Cobb usa una toalla similar a la que Edwin James tenía en su mesa en el comedor.
- Justo antes del inicio del tiroteo en el supermercado, se puede ver el anuncio "Kelvin Fish Cannery" en una pared. Kelvin es el nombre del abuelo de J.J. Abrams y aparece en muchos de sus trabajos (como Star Trek, LOST, Fringe, Misión Imposible III, así como el piloto de Alcatraz).
- Ernest Cobb es el segundo personaje del grupo del 63 capturado por el grupo de investigación. También es el segundo reaparecido visto siendo llevado a la nueva prisión y en ser disparado (primer disparo de Hauser a un reaparecido).
Notas de producción[]
- Jeffrey Pierce (Jack Sylvane) aparece en el episodio, aunque sin diálogo.
Gazapos y errores[]
- Cuando Cobb hace la cama en su celda, la mesilla plegable de la pared está puesta, sin embargo al cambiar el ángulo de la cámara cuando él se sienta, está doblada.
- Se dice que Cobb adquirió el arma con una tarjeta de crédito. Sin embargo, en la grabación de vigilancia de la armería, se ve como paga en efectivo.
- A pesar de que se supone que Cobb ha utilizado un Winchester modelo 70, se le ve montando un rifle utilizando dos partes. No hay ninguna versión del modelo 70 que se separe en dos partes.
- Rebecca Madsen habla con un empleado de armería que admite haber vendido un rifle a un hombre que no reveló su nombre ni su dirección. En la realidad, el empleado probablemente hubiese sido encarcelado y la armería hubiese sido investigada ya que es ilegal la venta de armas de fuego a alguien que no proporcione un nombre y dirección.
Temas recurrentes[]
- Cobb visita a su madre, quien no quiso verle. Además, sentía celos de su hermanastra, que recibía más atención que él. (Familia)
- Cobb es encarcelado en Alcatraz. Tras su misteriosa desaparición en 1963 y su reaparición en 2012 con el mismo aspecto, vuelve a ser encarcelado en una nueva prisión. (Prisión)
- Cobb busca asesinar a chicas de 16 años para, de algún modo, vengarse de que su hermanastra recibiese más atención y fuese más querida que él. (Venganza)
- Cobb busca constantemente el traslado a confinamiento solitario: hiere a un guardia para conseguir el traslado a Alcatraz, pide formalmente el traslado a una celda en la zona de confinamiento solitario y, al no conseguirlo, desobedece la rutina matinal de Alcatraz. (Soledad)
Referencias culturales[]
- JLA Secret Files & Origins #2 (vol. 1; DC Comics): visto en la tienda de comics de Diego Soto. (Literatura)
- Call of Duty: Doc Soto menciona Call of Duty: Urban Warfare en la armería. (Juegos)
- Lost: Posibles referencias a los números. (Cine y TV)
- Antes de que le capturasen por primera vez, Cobb causó incidentes en 8 ciudades.
- En el hotel, parecía que Cobb estaba en la habitación 123.
- Investigando a las víctimas de Cobb en la base, Rebecca dice que siempre hay una chica de entre 15 y 16 años.
Técnicas literarias[]
- Flashbacks de 1960 muestran eventos clave ocurridos durante la estadía de Ernest Cobb en la prisión de Alcatraz. (Flashbacks)
- Se revela que Lucy Banerjee trabajó en Alcatraz durante 1960 como psicóloga para Ernest Cobb. (Cliffhanger)
- Cuando Rebecca pregunta a Lucy si lleva mucho tiempo trabajando con Emerson Hauser, ella le responde «Con él, sin él» y la detective le mira sin entender la respuesta. (Prefiguración)
Enlaces externos[]
- Ernest Cobb en IMDb.
Alcatraz -- Primera temporada | ||
#01 "Pilot" | #08 "The Ames Brothers" | |
#02 "Ernest Cobb" | #09 "Sonny Burnett" | |
#03 "Kit Nelson" | #10 "Clarence Montgomery" | |
#04 "Cal Sweeney" | #11 "Webb Porter" | |
#05 "Guy Hastings" | #12 "Garrett Stillman" | |
#06 "Paxton Petty" | #13 "Tommy Madsen" | |
#07 "Johnny McKee" | ||